Biografia de la Santa Cena de Baeza



Cofradía del Santísimo Cristo del Amor en su Santa Cena y María Santísima de la Paz



En el corazón de los hermanos existe un rincón para los orígenes, cuando el 31 de Agosto de 1985 se funda la congregación. Y aceleradamente se busca un escultor en Jaén, que efectúa un primer Cristo, que no gusta a los Baezanos, y que se conserva en la Capilla de las Ánimas de la Catedral, con gran devoción.
Tras el traspié se confía en el sevillano D. Manuel Hernández León, que realiza una nueva imagen que no es del agrado de los cofrades y, en un hecho que le honra, decide efectuar una nueva y definitiva talla. El 4 de julio de 1.993 la obra está finalizada y es bendecida por D. José Melgares Raya, ante la emoción de hermanos y autor.
El grupo escultórico de Jesús con los apóstoles en su Sagrada Cena es procesionado en un trono de madera de cedro tallado magistralmente por D. Antonio Duran Galindo, que reproduce en la canastilla y respiraderos los motivos frutales y hojas de acanto del Retablo Mayor del primero de nuestros templos y candelería y guardabrisas dorados por dos de sus hermanos.
En 1989 Hernández León realiza una Dolorosa que presenta en Sevilla en el certamen anual de imaginería, ganando el primer premio de dicho año, debido a su belleza, la suavidad de su rostro y la serenidad ante el dolor que empezaba a conocer. Pero su verdadero propósito es que fuera titular de la Santa Cena Baezana. Pero en aquellos momentos los cofrades no pensaban en incorporar a la Cofradía una Virgen, debido a las dificultades económicas de la congregación, que hacían imposible afrontar tal proyecto. Pero con motivo de que en noviembre se celebraba el 450 aniversario de la dedicación de nuestra S. I. Catedral al Dogma de la Natividad de la Virgen María, y que el templo carecía en ese momento de Dolorosas, es por lo que se decide traer a nuestra Señora de la Paz a tan bella morada. Fue tan grande el esfuerzo que no se pudo adquirir una saya nueva para vestirla, por lo cual una hermana le donó su vestido de novia.
El 21 de marzo de 1.993 en la Iglesia de San Juan Evangelista se realiza la misa de clausura de la exposición de Dolorosas de nuestra ciudad. Y en tan magno acontecimiento fue bendecida la señora titular de nuestros corazones, por lo que fueron derramadas por sus fieles lágrimas de alegría. En la actualidad se trabaja despacio pero en firme para su salida en procesión, intentando no dar ningún paso atrás.
Los acontecimientos se suceden y el sábado 19 de marzo de 1.994, D. Santiago García Aracil, Obispo de la Diócesis de Jaén, comunica a los hermanos que su paso podría procesionar en la próxima Semana Santa, integrado en el guión de otra congregación, y acompañado por 10 de sus cofrades vestidos de calle. Ofreciéndose para ello la cofradía religiosa del Santísimo Cristo de la Columna y Ntra. Sra. de las Lágrimas, por lo que el Miércoles Santo, 30 del mismo mes, los recuerdos, emociones, sacrificios, lágrimas y sudores de nueve eternos años se dieron por buenos cuando a las seis menos cuarto de la tarde se abrió la puerta de Santa María y Jesús del Amor pisó las calles por primera vez.
El domingo 12 de febrero de 1.995 son aprobados sus estatutos y obtiene la autorización canónica, conviertiéndose de este modo en una congregación de pleno derecho. Por lo cual el 9 de abril tiene lugar el primer desfile procesional de su historia. Y así las calles se llenan de inmaculadas túnicas, ceñidas con fajines de vino, sangre de Nuestro Señor, blancas capas al viento y rojos capirotes que cubrían rostros repletos de emoción que seguían la enorme y pesada cruz de guía, realizada por el baezano Salvador López Rus.
Y son ya nueve inviernos en los que un grupo de hombres en las frías y húmedas noches de maretazo, se reúnen en una retirada cochera, con un único objetivo: el de anunciarse como si de uno solo de ellos se tratase, haciendo de cada paso una oración, con fe, honestidad y seriedad, pues el peso de las trabajaderas les acerca al de esa cruz, que por la calles de la agonía, llevó nuestro señor hacia al Calvario, donde moriría por la salvación de todos nosotros.
Y tan encomiable trabajo lo realizan como mejor saben y pueden, teniendo su propio estilo y forma de ser, pues a cada uno de nosotros Dios nos da una manera deacercarnos a Él.

1 Comment:

Eugenio Santa Bárbara said...

Mirad en:

http://www.ubedaenlared.com/cruzdeguia/cg/?p=937