Biografia de La Expiracion


Venerable y Antigua Cofradía del Santísimo Cristo de la Expiración



"En el nombre de la Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, tres personas y un solo Dios verdadero, y de la Santísima Virgen María, nuestra Señora Madre de Dios y universal Señora nuestra abogada...", con este invocación comienzan los primeros Estatutos de la Cofradía Penitencial de "La Expiración de Jesucristo Nuestro Redentor", fundada en el Convento de Nuestra Señora de la Merced, de la ciudad de Baeza, el 30 de Marzo de 1603.
La diferencia más notable de esta hermandad con relación a otras existentes en Baeza en la misma época, fue la exigencia estatutaria de pertenecer a la nobleza de la ciudad para poder ingresar como hermano. Tras un periodo no determinado de tiempo de práctica desaparición, los hermanos de la Esclavitud de Nª Señora de la Merced, reorganizan la cofradía en 1830. Utilizan para ello los antiguos Estatutos, que son adaptados y reformados, y la misma imagen de crucificado que aún sin hermandad había seguido recibiendo gran devoción popular.
En 1836, tras la Desamortización de Mendizábal y la ruina del Convento Mercedario, la Cofradía decide trasladarse a la Parroquia de San Pablo donde reside desde entonces. En 1910, reforma de nuevo sus Reglas y transforma en parte sus fines sociales convirtiéndose en Cofradía y Sociedad Religioso-Caritativa y Benéfica del Santísimo Cristo de la Expiración.
Los actuales Estatutos por los que se rige la hermandad fueron aprobados en el año 1995. En 1992 se adhiere la Devoción del Señor de las Necesidades, encargándose desde entonces de los Cultos y Fiestas que tienen lugar en la Ascensión del Señor.
Entre los enseres de mayor valor hay que destacar un sudario de seda, bordado en oro fino y pedrería, verdadera joya del siglo XIX. También bordado el magnífico Estandarte que data de la reforma de 1910 y que fue restaurado en 1990.
PASO
La impresionante imagen del Cristo de la Expiración es, con toda seguridad, la original de 1603, realizada dentro del manierismo imperante en la época. Está atribuida al escultor Sebastián de Solís, quién alcanzó gran fama en la diócesis jiennense gracias a la calidad de su obra. La imagen del Cristo de la Expiración es de las más antiguas de este tipo iconográfico de Andalucía y está considerada como una de las de mayor calidad artística. El Instituto de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Madrid la restauró y catalogó como "Bien Cultural" en 1992.
El Paso del Cristo de la Expiración está magníficamente tallado por el sevillano Antonio Duran, en madera de caoba barnizado en su color, con candelabros arbóreos de tulipas y cabeza de querubines. Ocho angelitos escoltan los 4 medallones centrales con sendos plafones de plata que representan escenas de la Pasión, el escudo de la ciudad y el mercedario de la cofradía. Las capillas de las esquinas cobijan imágenes de los Evangelistas, realizadas por Manuel de los Ríos y el resto de los motivos plateados son obra del cordobés J. Ibáñez.